Eduardo Montealegre fue designado por el presidente Gustavo Petro como nuevo ministro de Justicia, en reemplazo de Ángela María Buitrago. La noticia se conoció en primicia gracias al director de La W, Julio Sánchez Cristo, quien confirmó la elección esta mañana durante su programa de radio.

Montealegre, quien se desempeñó como fiscal general de la Nación entre 2005 y 2009, es una figura reconocida por haber impulsado investigaciones contra la corrupción y los vínculos entre políticos y grupos ilegales. Su llegada al gabinete de Petro marca el retorno de un exfuncionario con amplia experiencia en materia judicial y en la lucha contra las redes criminales.

La renuncia de Ángela María Buitrago se produjo en medio de tensiones internas en el Ministerio de Justicia, luego de que se presentaran varias críticas al manejo de reformas legislativas y proyectos de ley en curso. Con esta sustitución, el gobierno busca reforzar su estrategia de seguridad jurídica y avanzar en la implementación de su agenda en materia de justicia transicional.

Uno de los aspectos más llamativos de este nombramiento es su impacto en el juicio contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez. Según Sánchez Cristo, “hoy habrá una noticia que, cuando se confirme, le dará un giro al juicio contra Álvaro Uribe Vélez. ¿Por qué? Una de las supuestas víctimas será ministro de Justicia. Es decir que a las audiencias ingresará por parte de las víctimas un ministro de Justicia, Eduardo Montealegre”.

Con esta designación, el presidente Petro envía un mensaje claro al país y, en particular, al Congreso: “se va a enfrentar al Congreso judicialmente para defender sus reformas y sus cambios”, aseguró el director de La W. La administración busca así reforzar su posición frente a las bancadas que han cuestionado varias iniciativas, especialmente las relacionadas con la justicia y los derechos humanos.

Analistas políticos advierten que este nombramiento podría intensificar el debate en torno a la independencia del poder judicial y la influencia de sectores políticos tradicionales. Asimismo, se espera que Montealegre enfrente el reto de coordinar las reformas en curso, fortalecer la lucha contra la impunidad y garantizar la protección de las víctimas en procesos de alto perfil.